Algo así me siento todos los días...

miércoles, 17 de enero de 2007

De ideas y otras cosas

Y si te pones a pensar que es lo que pasa realmente por tu cabeza te daras cuenta de que no hay orden alguno en ello y que los pensamientos se siguen uno tras otro sin sentido alguno como una especie de algún tipo o clase o lo que sea eso de animales salvajes que corren libres por la selva o estepa o donde sea que corran ellos como si los persiguiera algún otro animal salvaje con el afán de devorarlos y preparalos para su suculenta cena que bueno si lo pensamos bien no los prepararían exactamente ya que los animales no son civilizados como nosotros y simplemente se comen la comida que les toca tal y como está sin tener todo un ritual de preparación como los que hemos creado nosotros desde hace mucho tiempo y que se le conoce vulgarmente con el nombre de cocinar y se ha vuelto un arteal que no se le permite accesar a todos hasta los conocimientos más profundos del mismo pero todos podemos accesar a lo más externo del mismo porque de todos modos hemos de comer y no podemos depender siempre de otras personas para alimentarnos como solían hacerlo los grandes reyes de la antigüedad y algunos modernos también aunque ya no son reyes exactamente pero que de todos modos siguen poniendo su dieta en manos de otras persona que obviamente tienen que ser profesionales que sepan satisfacer sus necesidades y gustos ya que por si solos no son capaces de hacerlo ya que no han sido educados de manera que puedan hacerlo porque se deben enfocar en otros asuntos que ellos consideran más relevantes como lo vendría siendo la política, economía, finanzas, relaciones internacionales o incluso los chismes de la alta sociedad que nunca están de más entre ellos y los ayuda quizá a conocerse mejor pero especialmente a matarse unos a otros pero obvio no de la manera literal sino en un sentido figurado en el que se quiere decir que se destrozan su reputación unos a otros como fieras salvajes habitantes de las estepas que ya acabo de mencionar y me estoy dando cuenta de que sin querer volví más o menos al inicio del texto pero de todos modos esa es la forma en la que trabaja el cerebro y las ideas que no siguen patrón de ningún tipo más que el suyo propio y ese patrón no es un patrón como tal por es un patrón que rompe con todos los patrones establecidos y no lleva ningún tipo de patrón que podamos entender y que resulta igual o más confuso que lo que acabo de escribir al poner como cien mil veces la misma palabra y hacer de algo tan sencillo algo más confuso y extraño y que estoy seguro de que en algún momento habrá alguien que lea esto y me diga que no entiende ni madres de lo que estoy poniendo aquí como ya me ha pasado en varias ocasiones más en otros lados con textos pareciso que no siguen ningún tipo de orden o de lógica o de coherencia de las que usamos a diario y por lo tanto se vuelven un poco bizarros y confusos para unos quienes creen que para poder entenderlos se necesitaría algo así como una pequeña ración de mota o algo parecido para ponerse al nivel y hallar sentido a esto de la misma manera que yo se lo hallo aunque he de confesar que a veces ni yo mismo sé de dónde sale esto o cuál es el sentido que tiene en el momento que lo escribo ya que generalmente sólo me siento a escribir lo que sea que salga de mi mente y pase por mis brazos hasta los dedos y de ahí a las teclas que dejarán estas ideas retorcidas plasmadas en una pantalla que podrá ver cualquier persona en casi cualquier lugar en el momento que quiera ya que esa es la magia de la nueva tecnología de este siglo XXI en el que estamos apenas entrando y del cual no sabemos ni madres de que vendrá en él pero ya estamos haciendo como siempre nuestras predicciones al respecto de lo que pasará y generalmente como siempre suele pasar hacemos predicciones fatalistas como el famoso fin del mundo que viene pasando desde hace más de dos mil años en diferentes lugares y distintas épocas y de maneras que no son iguales una entre la otra siempre improvisando y agregando algo nuevo a las formas horribles y descabelladas que tenemos nosotros para morirnos y pasar a un mundo diferente donde quizá dejemos de tener carne y nos volvamos ideas etéreas y sin sentido alguno que vagará sin ningún orden ni patrón establecido.

lunes, 15 de enero de 2007

The Queer Blog

And here comes the queer blog!!! Bueno, leve, pero la jotería no se mantiene tan calladita por siempre, jejeje, y si no lo creen, pregúntenle a los creadores del blog de Trastorno Bipolar. Por Dios, no he visto jotería más grande en toda mi vida... bueno... omito comentarios, porque también he visto cada cosa que, oh, Dios mío!!! Requiere de un gran valor poder enfrentarse a ello (como el hecho de que a tu ex le de por salir de vestida una noche al antro o.O). Pero bueno, ya que ando por estos rumbos y hablando de cosas raras como estas, pues quiero primero que nada reconocerle a aquella bola de gays, jotas y reinas (cada grado es mayor que el anterior, como entenderán) el valor que tienen para muchas cosas. Wow!! En serio, algunos me sorprenden bastante con l que hacen y demás... bien, no digo que todos sean la gran maravilla, obvio, pero de todos modos, los que si valen la pena... vaya que lo valen. Puedo concordar con las mujeres al decir que un amigo gay es el mejor que puedes tener, el más fiel, el más empático, el más sincero... bueno, en general lo son. Claro que nunca faltan las perras (y peor aún, las gatas) que se la pasan viboreando y matándose unas entre otras, e incluso a gente que cero que ver con ellas. Bueno, como en todos lados, no estoy diciendo que el ambiente sea el lugar perfecto e ideal (como lo cree el chavito de Lo Que Surja [LQS], así o más copia barata de QAF, trauma!!!!! Búsquenlo en Youtube y entenderán), pero pues tiene sus asuntos bastante rescatables y que no creo que deban ser juzgados tan feo como a veces se le hace. OK, ok, estoy de acuerdo que la mayoría de las jotas (y en esta ocasión me refiero a las que en verdad caben en el calificativo, dejando de lado a los gays, que para fines prácticos consideraré aparte) no son de reputación muy envidiable... menos si son las primeras seis letras de esa palabra (me entienden... y queda muy bien por cierto, jajaja). Como sea, el punto es, a pesar de esa reputación bastante trillada y triste, pues siempre existe aquellos a los que puedes rescatar y decir "Vaya, no es tan malo como creía". ¡Vamos! Hay mucha gente ahí afuera a la que le pueden preguntar (especialmente a las nuevas generaciones), y se darán cuenta de cómo muchas personas que han tenido trato cercano con el ambiente generalmente salen con buenos comentarios como "Sí, es mi mejor amigo y nos llevamos muy bien", "Es una de las personas que más confianza le tengo", "Siempre me ha apoyado", o cosas parecidas. Bueno, creo que los gays son de las mejores coss que pudiera tener este mundo, sinceramente. Si no fuera por ellos, no veríamos las cosas con el amplio horizonte con que las vemos, no habría desarrollos en las artes como lo ha habido hasta ahora, no habría una campaña solidaria por la tolerancia y el respeto. Pero sobre todo, no seríamos quienes somos... queer quizá, pero orgullosos de ello. Parafraseándo a un amigo mío: "Si Miguel Ángel hubiera sido heterosexual, la Capilla Sixtina hubiera sido pintada de blanco y con un rodillo".

¿Qué es lo que quieres?

¿Y alguna vez te has puesto a pensar en qué es lo que en verdad quieres? Digo, siempre decimos que queremos esto, que queremos aquello, nos gustaría alguna cosa, o alguna persona, obtener ciertas metas, beneficios, conocimientos, poder, ideas... bueno, en fin, la lista es larga. Sin embargo, pocas veces podemos decir que eso es realmente algo que queremos. Muchas veces es más bien una necesidad que debemos buscar satisfacer de cualquier manera, a veces conciente, a veces inconciente, pero de todos modos tratamos de hacerlo. Mientras que lo que en verdad buscamos, aquello que nos llenará por completo y nos ayudará a encontrar el verdadero sentido de esta vida... bueno, no siempre lo vemos en verdad. En ocasiones llegamos a vislumbrar un poco de ello, pero de inmediato llega algo más que nos distrae y nos olvidamos de aquello que en verdad queremos conseguir. Y no hay que confundir, esto no se trata de una necesidad más que necesitamos llenar, ya sea física, fisiológica, emocional, intlectual, espiritual, etc. Se trata de algo más allá... creo que la mejor palabra para poder describirlo sería (aunque se aleja de la verdad, pero es la mejor para entenderla nosotros en nuestra realidad), una necesidad, pero de un tipo trascendental. Es la necesidad máxima, la más importante, la que nos acercará a un nuevo mundo que no somos capaces de vislumbrar aún. Pero a pesar de ser una necesidad trascendental, que al cumplirla las demás necesidades desaparecerían, es a la que menos atención le prestamos, si no es que nula. ¿Las consecuencias? Creo que no es necesario que yo las describa, sólo miren a su alrededor con atención y háganlo con los ojos del alma. Las consecuencias están ahí... y ahora, miren en su interior... esas son las más profundas y crueles. Sé que yo sólo soy un humano más como el resto de ustedes, y de la misma manera tengo mis problemas al tratar de alcanzar lo que en verdad quiero, de cumplir con esa necesidad trascendental... pero bueno, como en toda carrera, hay que dar el primer paso y supongo que este es el mío. Ahora toca al resto de ustedes comenzar a dar los suyos poco a poco...
Y es aquí donde inicia el viaje eterno que marcará tu rumbo...

viernes, 5 de enero de 2007

¿Y qué hay del miedo?



Y bueno... ¿qué decir del miedo? Todos lo conocemos, todos lo hemos experimentado... el miedo viene a invadirnos con nuestras peores pesadillas. El miedo y el terror parecen estar presentes en muchas ocasiones de nuestras vidas, algunas de ellas adecuadas, otras... bueno, sería mejor dejarlo pasar. Sin embargo, es algo demasiado fuerte, algo que siempre, de una u otra forma, nos lleva a tomar decisiones que a veces nosotros creemos adecuadas, pero no es así. El miedo nunca ha sido un buen consejero, el problema es que muchos lo confunden con la precaución y el cuidado. ¡Oh, si supieran lo diferentes que son! La precaución y el cuidado nos lleva a poder seguir adelante enteros (o al menos habiendo perdido los menos pedazos posibles), mientras que el miedo nos retiene en donde estamos, o en ocasiones el maldtio incluso se atreve a regresarnos varios pasos atrás. Sí, el miedo es poderoso, aunque no lo crean... es un enemigo temibe, y que muy pocos son capaces de enfrentar y vencer. Siempre es más fácil huir de las cosas, ¿no?, evitar aquello que nos da miedo, y no salir lastimados ni heridos. Suena bien de esta manera, porque nadie quiere sufrir, ¿cierto? Suena a una solución buena y razonable... pero estamos olvidando algo. ¿Y todo lo que hay detrás de ese riesgo que no tomamos? Las oportunidades nunca vienen en charola de plata, o es muy rara la ocasión que así pasa. Generalmente vienen disfrazadas de riesgos peligrosos, y parece ser que sólo los Dioses serían capaces de retarlos y salir de ellos sin ningún rasguño. Pero no... nos dejamos cegar por nuestro querido amigo el miedo. La verdad, es que tras esos riesgos, hay oportunidades maravillosas que traen consigo un botín enorme lleno de dichas, aprendizaje, buenos momentos, felicidad, gusto, paz, satisfacción, deseo, honor, alegría, amor... Sí, hay muchos tesoros y joyas tras esos riesgos a los que tanto tememos, hay oportunidades únicas en la vida que la cambiarán para siempre y le darán un nuevo giro, hay la posibilidad de lograr nuestros sueños y deseos más anhelados... ¿Sabes todo lo que has dejado pasar cada vez que te has dejado guiar por el miedo y has huído de las circunstancias? Los grandes hombres de la historia no se hicieron por huir de sus problemas y batallas con miedo, se hicieron por enfrentar ese miedo y atreverse a tomar esos riesgos con valor, esperanza y determinación. Así es como consiguieron marcar sus vidas y las de muchas personas más, de maneras altamente positivas. Así, es como se forja el destino.

jueves, 4 de enero de 2007

Feliz Año Nuevo... ¿?

Y ahora tenemos año nuevo... y con él llegan los clichés de siempre. "Próspero Año Nuevo", "Te deseo felicidad, amor, dinero y salud", "Que todos tus deseos se cumplan", "Éste será el mejor año de tu vida", "Este año te va a ir mejor"... Bien, al menos la gente es optimista, les doys 5 puntos por ello... pero es un optimismo vacío sin verdadero sentido que cae en el cliché aburrido haciendo que las frases pierdan sentido, por lo que les quito 10 puntos. Marcador final: -5.
Ok, sí, lo reconozco, son frases bonitas y que algunas personas sí lo dicen de corazón, pero la mayoría no lo hace. Además, por más buenos deseos q' demos, son frases también utópicas a su manera... siempre vemos el año nuevo como "EL" año donde todo será felicidad y las cosas irán viento en popa. Pero nunca nos ponemos a pensar... la vida nunca va a dejar que las cosas sean así, la vida siempre nos va a poner pequeños o grande problemas al frente para enfrentarlos y superarlos, para ponernos a prueba y ver si somos dignos de hacernos llamar "personas" y "seres humanos". En ese caso, podriamos tener mejores deseos para el año nuevo, ¿no creen?
Podríamos desear a nuestros seres queridos que tengan experiencias de provecho en este año que los hagan ser mejores personas, madurar, evolucionar, acercarse más a la perfección y superarse a sí mismos. Podemos desearles que sea un año lleno de energía, vitalidad y ánimo para hacer las cosas, y que así puedan cumplir los sueños que estén dentro de su control. Podemos desearles que sepan apreciar y disfrutar cada momento del año como si fuera único, porque son momentos que no se repetirán jamás y hay que saber apreciarlos con el valor que tienen. Podemos desearles un año lleno de entrega, lucha, determinación, pasión, optimismo (del de verdad), coraje, valor... todo lo necesario para que salgan adelante y puedan triunfar, haciendo de este año un gran año.
Sí... podríamos hacerlo, ¿por qué no? Ya sé por qué... siempre es más fácil caer en el cliché, ¿no? Es más fácil creer que la vida será bonita y nos dará leche y miel de árboles mágicos que crecen solos... dejamos que el miedo nos haga huir de esa lucha diaria que es la verdadera vida y que es lo que le da su sabor único y exquisito... todo un manjar. Sí... sigamos creyendo que las cosas son tan fáciles como sólo desearlas con palabras bonitas... sigamos diciéndonos cada 365 días (366 cada 4 ocasiones): ¡¡Feliz Año Nuevo!!