Algo así me siento todos los días...

domingo, 9 de diciembre de 2007

Lo que es el amor...

“Usted no sabe, lo que es el amor…” Pero en verdad lo sé… y sí que lo sé. Lo aprendí hace mucho tiempo, hace tanto ya, que siento que me ha influido de mala manera en mi vida. Ya no vivo para conocer el amor, para vivir y experimentar, para aprender y disfrutar. Ahora vivo sólo para sentirlo de nuevo, para hallar algo comparable a esa vez, para sanar la vieja herida que no cierra. Maduré, maduré mucho, quizá más de lo que debía. Y aún así siento que no he madurado lo suficiente.
Es cierto, amar es entregarse, es darlo todo por la otra persona y estar cegado por ella. Pero amar va más allá. Amar es saber humillarse, saber perdonar, amar es saber dar espacio. Amar es saber qué le pasa al otro, es acercarse cuando te necesitan, es ser tolerante, respetuoso, reconocer los errores propios y no echarle al otro en cara los suyos. Amar es saber dar otra oportunidad, es poder entender los sentimientos del otro sin que los diga, leer su corazón a través de los ojos. Amar es verlo en un atardecer, en la luna, ser capaz de oír la canción de las estrellas y reconocer su voz en ella. Es sentir su perfume de la nada, es traerlo a la mente a cada instante. Es pensarlo a diario, querer sorprenderlo, darle detalles, pasar el tiempo con él a pesar de tener otras prioridades, o perder el tiempo a su lado sin nada qué hacer. Amar es ser capaz de perder tu vida por esa persona y de sacrificarlo todo sólo por que tenga un momento de felicidad, o mejor aún, toda una vida. Cuando le dices a Dios: “Toma mi vida, pero cuídalo por siempre”, porque nunca quieres verlo sufrir.
Amar es eso y más, es algo que pocas veces conoces. El verdadero amor sólo se vive una vez, y sólo una vez te basta para comprenderlo, y saber que puede llegar más allá de todo. Puedes sentirlo, en una canción, en una nube, en una brisa, en un perfume, en una mirada, en una sonrisa, en un abrazo. Aprendes a amar a todos, aprendes a quererlos por lo que son, aprendes a valorarlos. Y a esa persona, aprendes a vivir por y para él, y aprendes a superarlo todo sólo por su amor. Si amas, no basta con entregarse y estar cegado. Debes saber perdonar y seguir adelante. Cuando amas no importa nada, porque si es amor de verdad, lo superará todo y los problemas sólo lo fortalecerán y se harán pasado. Eso pasa cuando en verdad eres capaz de amar.
Amar implica saber cuando uno se equivoca, cuando ha tenido la culpa y estar dispuesto a pedir perdón y enfrentar las consecuencias. Amar es aprender de los errores y no volver a cometerlos, es tomar la lección y seguir adelante, más maduro y dispuesto a vivir por el ser amado. Amar es pedir perdón, desde el corazón, no sólo desde la boca, y sentir el arrepentimiento en lo más profundo y en la piel. Amar es no cometer dos veces el mismo error y luchar constantemente por ser alguien mejor. Amar es saber humillarse cuando se requiere, y frente a quien se requiere, sabiendo que la culpa es de uno y de nadie más. Un error no es dejar de amar o que a uno le valga un carajo lo que pase, el sentimiento propio o el de la otra persona. Es humano y es natural, y no borra el sentimiento. Si es real, lo reforzará.
Amar… ¿qué es amar? No es fácil decirlo, porque es algo que sólo puede sentirse. Pero créeme… yo sé lo que es amar. Conozco eso y mucho más. Pero no dejo de ser humano. Aún tengo cosas por aprender. Y si quieres, podríamos aprender juntos.

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